Los estupefacientes, el prohibicionismo ante la educación.
Por Francisco N. Ferrón Creo que lo fundamental en éste tema es la educación de la población en general y del consumidor en particular. Pero esto es diametralmente opuesto al prohibicionismo. El prohibicionismo -autoritario- no permite el libre juego de los argumentos, sino que intenta determinar de antemano que pienses lo que pienses no importa. Es la típica expresión ipso iure . Y que tanto atenta contra el principio de racionalidad de los actos de gobierno. Justamente, porque la disparidad está en que educar es pensar y prohibir obedecer. En igual sentido, la prohibición de una conducta lleva aparejado -en mayor o en menor medida- una connotación negativa, que determina la inmoralidad de la acción. No todas las personas pueden diferenciar entre delito y pecado, que mínimamente están –en algo- relacionados. Dentro de una sociedad como la nuestra -que está en pañales en el entendimiento de lo que es un Estado de Derecho- se genera a través del prohibicionismo, un juego...